Pa' no dejársela a la muerte

viernes, diciembre 03, 2004


Cumbe: gastronomía venezolana de altura

Una vez más, tal y como lo reseñé con Machine, la conjunción armónica entre gastronomía, arte, naturaleza y arquitectura, se integran en un espacio de deleite multisensorial en el maravilloso Ávila Mágica, obra de Francisco y Luis Pereira (ITC Foods SA). Un hermoso nombre que rememora la época de la esclavitud, un tributo a lo que fueron las zonas aledañas a las haciendas donde los negros realizaban sus reuniones clandestinas en tiempos de la colonia. Para ellos, la posibilidad de vivir libres lejos de los ojos del amo, para nosotros la cuna de nuestra cultura mestiza. Este espacio fue creado con la intención de reencontrar a ese venezolano de espíritu libre que moraba en los cumbes, con el de hoy, de cierta forma también esclavo de estos tiempos. El ambiente combina lo moderno con lo rústico de la madera, material que le otorga calidez a un local más bien pequeño e íntimo. Ni hablar de la romántica chimenea que alumbra las paredes verde manzana bellamente adornadas con las simbólicas fotos de Susana Arwas, artista venezolana que logró registrar con precisión, sobre espejos, la relación de la cultura negra con sus alimentos. Y por supuesto, la vista. Desde la agradable terraza, el rostro más bonito de Caracas se desnuda eufórico cuando la neblina y el frío se lo permiten.
Gracias al buen nivel aportado por las escuelas y los numerosos y excelentes chef que habitan en la capital, hoy por hoy es relativamente fácil disfrutar de excelentes propuestas gastronomitas e innovadoras de la cocina tradicional venezolana dentro de la cuidad. Pero, qué pasa con aquellos extranjeros que desconocen los rincones capitalinos y que creen que nuestra gastronomía se resume en una arepera. Este es también su lugar ideal. Es hora de que los turistas extranjeros se lleven un pedacito de Venezuela a la boca y lo dejen grabado en su alma. Para complacer el gusto de extranjeros y nativos, Omaira Toro, una apasionada de la cocina venezolana por herencia y chef a cargo, decidió ofrecer en el menú recetas emblemáticas de todos los tiempos, incluso aquellas que resucitó de los viejos fogones de las abuelas y las nanas. El menú ofrece también platos venidos de distintas regiones del país, que dan una idea de la variedad de influencias que a lo largo de los años ha recibido esta cocina, en principio fraguada entre indígenas, españoles y negros, y que más tarde sería enriquecida por las migraciones de europeos y asiáticos. La presencia de ingredientes como el ají dulce, el maíz, las caraotas, el apio, los plátanos, la carne de vaca, gallina o pollo, el chocolate, el tamarindo, todo, se conjuga para formar un plato que derrocha colorido para alegrar la vista y una exuberante sazón para complacer al alma. Es, la culinaria tradicional rejuvenecida con técnicas y estética contemporáneas tal y como lo exigen los tiempos modernos. Los tequeños, las arepitas (anís, chicharrón, ají dulce, jengibre y anís, y andina), las empanaditas de cazón, o unos tostones con crema de queso recién fritos de seguro logran abrirle el apetito. Como entrada puede disfrutar de una crema de apio con torticas o un hervido de pescado. Si prefiere algo más ligero puede pedir la ensalada verde con queso de cabra o la exótica ensalada de camarones con mango. Como principal el roastbeef de ganso a la criolla con pudín de maíz; el asado negro moderno con puré de batata o unas chuletas de cochino podrían ser una buena opción. Los postres son una tentación irrechazable: torta de queso de Alicia con delicada de guayaba, espuma de chocolate al romero con salsa de mango o parchita; o la extinta torta Bejarana hablan por sí mismos. El consumo promedio por persona es de aproximadamente Bs. 50 mil. Definitivamente, un espacio donde la cocina venezolana es enaltecida, dándole el tratamiento y cuidado que las grandes cocinas exigen, para convertirse en una ofrenda que halaga el gusto, despierta recuerdos y provoca nostalgias.

Parque Ávila Mágica-estación Ávila. Cerro El Ávila, urb. Maripérez, av. principal de Maripérez con av. Boyacá. Teleférico de Caracas. Horarios: martes y domingo, 12:00 m a 8:00 pm; de miércoles a sábado, 12:00 m a 12:00 pm. Teléfonos: (0212) 315 9998 / 901 5555.