Pa' no dejársela a la muerte

lunes, noviembre 15, 2004

Mis paranoias

Siempre que "paseo" por la centrica av. Baralt montada en una de esas camioneticas identificadas con sus particulares letreros fosforescentes verde-fucsia-naranja caigo en este mismo pensamiento: el reto para cualquierr mente paranoica como la mía es lidiar, durante los 20 o 25 minutos que usualemnte dura mi trayecto, conmigo misma. Hoy, como muchos otros días, en lo primero que pienso es que tengo muy poco que perder, 500 bolívares que no son míos, un paraguas regalado que para colmo se lo compraron a un buhonero, un radio que tampoco es mío y el que síi es mío está estartalado en otro bolsillo de mi eterno bolsito azul made in colombia, un trident de canela que lleva semanas en otro de los bolsillos, las llaves de mi casa...de hecho creo que lo más valioso e irrecuperable en todo caso sería este cuaderno donde ahora estampo mis pensamientos en una caligrafía irrespetuosa que llevo rato coqueteando con el movimiento de mi mano derecha...-dije la vida????-...bueno y la vida, esa que exponemos todos a diario sin saber cuando nos toca entregarla.
Estoy sentada cerca de la puerta, por aquello de que si te sientas atrás te roban pero si te sientas adelante eres la primera en la lista. De El Paraíso hasta acá (más o menos a la altura de las torres del Centro Simón Bolívar) se han montada tres tipos, dos más han abortado en el intento, con sus cajitas bajo el brazo llenas de dulces...TRES y cada vez que se sube el próximo no veo el momento en que pronuncien las palabras mágicas y saquen de su cajita la pistola más grande que jamás hayan visto mis ojos, porque además y para completar acabo de recordar que hoy es quincena y yo estoy aquí como al descubierto, sólo con un Red pepper que nunca he usado... presa de un pánico que me aborda todos los días, invadida por el miedo de estar siempre esperando lo peor y confundiendo caramelos con armas, gente con malandros, niños con delincuentes, miradas con malas intenciones...!!!qué mente enferma la mía¡¡¡¡
Luego el metro, la máxima expresión de la poesía urbana de una ciudad que se distancia tanto de mi COMUNA utópica...Capitolio...Capitolios ...el verdadero paraíso de pensamientos colectivo, de sensaciones comunes...doy un paso atrás por si el grandulón parado a mis espaldas se le ocurre empujarme y acabar con ?¿?¿-dije mi vida-volteo a mirarlo de reojo como adivinándolo pero de inmediato recuerdo que la inocencia puede estar en la mirada de cualquier asesino, así que su mirada es lo menos importante. Entro y me alejo del tipo, una señora corre para quitarme mi puesto, otra "moralista" logra levantar a un niño para que le dé el puesto a una señora con un bebé en los brazos...su mamá sentada lo mece, se ven pobres, la ropita sucia...vieja, pero la mamá luce un perfecto y recién hecho manicure y para qué mencionar el que tiene en los pies...
A la gente le mata la curiosidad... saber qué es lo que estoy escribiendo, claro además haciendo equilibrio en un vagón que no viene tan lleno a pesar de las adevertencias de aumento de transporte del 20%...Una niña de esas camisa azul...entra en Sabana Grande con sus estrellistas en la cabeza, y sin dejar de mirarse en el espejo y acomodarse la falda una y otra vez tambalea el germinador de caraotas que alguna vez yo también hice, entonces me pregunto para que coño hace uno un germinador teniendo casi 12 años y un cerro tan hermoso como el Ávila cubriendo de polo a polo lo que queda de la sucursal del cielo...suspiro...entonces pienso en él y me calmo.

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